Mascarillas para la cara grasosa con limón
El cutis graso es desagradable, además de tener siempre el brillo característico en nuestro rostro. Conseguimos la mayor aparición de puntos negros. Para esto necesitamos las mascarillas para la cara grasosa.
Por tanto tiende a presentar acné en una proporción mucho más alta que en pieles secas. Lo que puede acabar por volverse en un gran problema.
Casi siempre, la aparición de cutis graso se debe a una mala alimentación. Cuando estamos en estados de estrés o ansiedad, también a alteraciones hormonales y causas hereditarias. Una de las formas de mejorar el aspecto de la piel grasa es con ayuda de mascarillas para la cara grasosa.
Y como para todo problemas existe una solución, están las mascarillas para la cara grasosa a base de limón y otros ingredientes que combaten el exceso de sebo en la piel.
Actuando muchos como exfoliantes, mientras que el limón nos servirá de antiséptico natural. Lograras limpiar los poros en profundidad y previniendo la aparición de los detestables puntos negros.
Mascarillas para la cara grasosa con limón:
- Mascarilla de plátano, miel y zumo de limón: se agarra un plátano maduro, lo colocas en un bol y lo haces puré, le agregas la cucharada de miel, y la cucharada de zumo de limón mezcla todo muy bien hasta que toda la mezcla quede homogénea.
Lo aplicas sobre la cara y el cuello lo dejas hasta que seque aproximadamente uno 15 minutos, luego lavar la cara y el cuello con abundante agua tibia.
- Mascarillas de miel naranja y limón: se lava y se seca una naranja cuelo la cascara ya seca se hace polvo, se mezcla con una cucharada de limón y otra de miel hasta formar una pasta para luego aplicarla en la cara a través de movimientos circulares. Es una muy buena mascarilla para la cara grasosa.
Luego de ser completamente aplica en el rostro, esperar 20 minutos, luego se retira con un paño húmedo.
- Mascarilla de limón y leche: esta mascarilla es una de la preferida para disminuir los excesos de grasa de la piel de la cara, para la preparación de esta mascarilla.
Mezclamos tres cucharadas de leche, una cucharada de zumo de limón. Podemos agregarle una pizca de cúrcuma. Se revuelve todos los ingredientes muy bien. Esta pasta que nos queda se va a aplicar en la cara y el cuello, esperamos que esta se seque y luego la retiramos con abundante agua fría.
